En el momento de
excitar a una chica, hay ciertas puntos en el cuerpo femenino que
estimulados correctamente consiguen llevarla a límites de placer insospechados, y, sin duda, uno de los más potentes son
los senos. Sin embargo no solo basta con acariciarlos y masajearlos, pues la forma de
besarlos y lamerlos
será clave en la excitación y en el éxito del encuentro. Si quieres
cómo volver loca a tu chica en la cama e impresionarla en los juegos
previos, no te pierdas el siguiente artículo de unComo en el que te
contamos paso a paso
cómo besar los senos.
Los
senos son una de las principales
zonas erógenas femeninas
pero también una de las más sensibles y delicadas del cuerpo de una
mujer, debido a la gran concentración de terminaciones nerviosas que
allí se encuentran. Es por ello que antes de empezar a
acariciarlos y besarlos debes tener en cuenta que
la suavidad será clave para excitar y dar placer a una chica.
¡Lo ideal es no precipitarse! Primero, sorprende a la chica exhalando tu aliento sobre el seno sin llegar a rozarlo con los labios, esto empezará a excitarla y a tener ganas de más.
Luego, acerca tu boca y empieza a deleitarla con suaves y tiernos besos
por todo el seno pero sin entrar en contacto todavía con el pezón.
Alterna los besos con ligeras lamidas eróticas y ve acercándote cada vez
más a la aureola.
La aureola y el pezón son las partes más sensibles de los senos, y una buena estimulación oral
se traducirá en un estremecimiento de su zona íntima, dando lugar a la
lubricación de la vagina. Cuando te concentres en estas áreas, dedica
unos minutos a pasar la lengua por la aureola realizando movimientos circulares y a besarla de forma lenta.
Por último, céntrate en la punta del pezón, tómala con los labios,
bésala y lámela tiernamente. Cuando notes que la excitación es elevada,
ve aumentando la intensidad de las lamidas hasta llegar a succionar y morder los pezones. En el momento de besar los senos, toma en cuenta que estos son muy susceptibles a los cambios de temperatura, así que algo que inundará a la chica de placer es dar soplidos ligeros sobre las partes húmedas.
No olvides prestar la misma atención a ambos pechos y combinar los
besos en los senos con las
caricias y la estimulación de otras zonas erógenas en ese momento, como por ejemplo masajear el
clítoris, los labios vaginales y la entrepierna con tus manos. Esto será la antesala perfecta para la penetración.