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Cómo usar el huevo de jade - Ejercicios Kegel

¿Has oído hablar alguna vez del huevo de jade? Se trata de un huevo de piedra mineral de origen chino muy preciado por los taoístas, quienes desarrollaron determinadas técnicas de autocuración para contar con una mayor vitalidad, longevidad y sexualidad. Y con el fin de mejorar la sexualidad femenina y fortalecer la musculatura del suelo pélvico, las mujeres taoistas encontraron que el huevo de jade era un artículo ideal para lograrlo, pues cumple una función similar a la de las bolas chinas. Si quieres conocer más detalles, sigue leyendo este artículo de unComo sobre cómo usar el huevo de jade realizando Ejercicios Kegel.

¿Cómo es el huevo de jade?
El huevo de jade es una piedra mineral semipreciosa tallada en forma de huevo y perforada por los dos lados, tanto en la parte inferior como superior, que ha sido utilizada tradicionalmente por mujeres asiáticas para elevar la vitalidad a través de los órganos sexuales.

Al igual que las bolas chinas, es un complemento ideal para la ejecución de los ejercicios Kegel, los cuales ayudan a tonificar los músculos de la vagina y mejorar el placer sexual. Veamos a continuación cómo usar el huevo de jade correctamente. ¡Toma nota!

El primer paso es limpiar muy bien el huevo de jade antes de empezar a usarlo. Lávalo con agua tibia y un jabón de ph neutro. Esto debes hacerlo justo antes y después de darle uso, así evitarás contraer posibles infecciones.

El huevo de jade contiene unos pequeños agujeros en sus dos extremos y para poder usarlo en la realización de los ejercicios Kegel, debes pasar por ellos un hilo de seda que te permita retirarlo de la vagina con facilidad, cuando hayas acabado.

Para que la experiencia sea más placentera, te aconsejamos aplicar una gota de lubricante de base acuosa en el extremo del huevo de jade que vayas a introducir primero en la vagina, que normalmente suele ser el lado más ancho.

Luego, sitúate en una posición cómoda, tumbada bocaarriba con las piernas ligeramente flexionadas o de pie con una pierna elevada, como si fueras a introducir un tampón. Si es la primera vez que utilizar un artículo sexual de este tipo, respira profundamente y dedica unos minutos a conseguir estar relajada.

Cuando estés preparada, ve acercando el huevo de jade a la entrada de la vagina e introdúcelo poco a poco insertando primero el lado más ancho. Una vez lo hayas acomodado en el interior, intenta contraer los músculos de la vagina, mantén la contracción de 3 a 10 segundos en función de tus posibilidades, y vuelve a relajar la musculatura de la zona. Puedes realizar unas 40 o 50 contracciones rápidas y repetir el ejercicio hasta en 10 ocasiones si lo deseas.

Usar el huevo de jade no solo es beneficioso para fortalecer los músculos de la vagina y el suelo pélvico, sino también para mejorar tu sexualidad, pudiendo llegar a disfrutar de relaciones mucho más placenteras, además de combatir problemas de incontinencia urinaria y prolapso uterino.

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